Hoy, como por fin es viernes y muchos cogéis vacaciones os traigo una escapada de fin de semana a una ciudad maravillosa de la Costa Brava: Cadaqués.
Es un pueblecito muy pequeño de la Costa Brava, lleno de casas blancas con ventanas azules y olor a mar. Muchos amantes del arte se acercan allí para conocer la casa donde vivió Dalí, que se puede encontrar en la zona norte. El camino para llegar es un poco complicado, un solo carril y un montón de curvas, por lo que si vienes a pasar el día es mejor venir a primera hora ya que se suelen crear muchas colas.
Hace unas semanas estuvimos allí con unos amigos. Alquilamos un apartamento muy cerquita de la playa, para llegar el viernes por la tarde, y así madrugar el sábado para ver el Cap de Creus.
Cap de creus
Es un espacio natural precioso, lleno de acantilados y islotes, y un maravilloso faro que alumbra toda la zona. Es el punto más alto, y las vistas son increíbles. Además desde ahí puedes empezar rutas por todo el paraje que parece sacado de una película.
Muy cerquita, tenemos el “Paratge de Tudela”. Es una ruta, de unos 3km (ida y vuelta) aproximadamente, y que solo se puede hacer andando. Al principio de la ruta deberás dejar el coche en el aparcamiento (si no recuerdo mal, cuesta 5 euros). Durante la ruta, puedes encontrar diferentes miradores y vistas preciosas, pero si por algo es famosa esta ruta es por las piedras en forma de animales. Sí sí, como leéis. Las rocas erosionadas por el agua y la tramontada, han dejado las rocas con “formas” muy parecidas a animales: un camello, un elefante…